jueves, 9 de junio de 2011

CONEXIONES ENTRE MÚSICA POPULAR Y LITERATURA EN GALICIA E IRLANDA

CONEXIONES ENTRE MÚSICA POPULAR Y LITERATURA EN GALICIA E IRLANDA: NOTAS PARA UN ESTUDIO
PRELIMINAR
Marco VÉLEZ BARREIRO
E.O.I. de Ferrol

RESUMEN
Las conexiones entre música y literatura en Galicia e Irlanda son abundantes pero poco estudiadas. Nuestro trabajo, que tiene vocación de estudio preliminar, pretende analizar sucintamente cuáles son algunas de las obras musicales gallegas que han bebido en los últimos decenios de fuentes literarias, tanto de tradición culta como popular. Igualmente, nos detendremos a comentar algunos de los grupos de canción protesta que, durante los años 70 y 80, se sirvieron de la literatura gallega para la construcción de sus obras musicales, generalmente con fines sociales y políticos.

Palabras clave: Música popular, música tradicional, literatura popular, música gallega, canción protesta.

ABSTRACT
The connections between music and literature in Galicia and Ireland are abundant, although they have never been thoroughly studied. Our work, that has been conceived as a preliminary study, aims at concisely analysing which of the Galician musical works have been created on the basis of Galician literature –both learned and popular– in the past five decades. We will also be dealing with some of the protest song groups which, during the 70s and the 80s, used Galician literature for the making of their works, generally with social and political purposes.

Key words: Popular music, traditional music, popular literature, Galician music, protest song.

ARTÍCULO
Si bien las conexiones entre música y literatura en Galicia son abundantes, pocos son los trabajos dedicados al estudio de las mismas. Paralelamente, lo mismo se puede afirmar de las relaciones entre las músicas gallega e irlandesa, que han sido muy fecundas a lo largo de los últimos treinta años pero que a duras penas han captado el interés de los estudiosos. Ambas músicas suelen etiquetarse comercialmente bajo la denominación de música celta y aunque, desde el punto de vista etnomusicológico, no tienen casi nada que ver la una con la otra, ha habido y hay contactos fecundos entre los intérpretes y  compositores de los dos países.

En este trabajo nos proponemos recoger algunas notas que hemos tomado con el objeto de sentar las bases de un trabajo más amplio sobre la relación entre música y literatura en Irlanda y en Galicia. No se trata de un estudio exhaustivo, sino el resultado de una primera cala para analizar cuáles son las posibles formas de abordar la cuestión. Comentaremos en primer lugar algunas obras y autores que se pueden considerar clave en la relación entre música y literatura en Galicia y que pueden servir como punto de partida. Concretamente, trataremos de la musicación de textos de literatura culta y popular en Galicia, así como de los textos de la llamada canción protesta.

Uno de los músicos que más ha trabajado por incorporar a su repertorio textos literarios gallegos es Amancio Prada. Nacido en la comarca del Bierzo, Amancio Prada da muestras de su pasión por la literatura gallega y muy especialmente, por Rosalía de Castro, desde la adolescencia. El cantautor musica dos poemas de la poetisa gallega en su primer disco, Vida e morte, grabado en 1974: Como chove miudiño y Un repoludo gaiteiro.

Posteriormente, decide volcarse en la poesía rosaliana dedicándole a la misma un trabajo completo que vería la luz en marzo de 1975 con el título Rosalía de Castro, en el que el cantautor se hace acompañar del violoncelista Eduardo Gattinoni. En esta obra discográfica, Amancio Prada musica algunos de los poemas más conocidos de Rosalía, tales como Adiós ríos, adiós fontes, Campanas de Bastabales o ¡Pra Habana! El propio cantautor desgrana en sus escritos su amor por la poetisa compostelana cuando explica:
Tenía entonces diecinueve años, cuando conocí de verdad la obra poética de Rosalía de Castro: viviendo en Castilla, sentí por primera vez la nostalgia de la tierra, el extrañamiento del aire, airiños aires... a través de sus versos. Casi sin darme cuenta, empecé a oír dentro de mí la música de aquellos versos y a cantarlos. Era como abrir el pecho y desahogarse. Ni siquiera pretendía entonces componer una canción: simplemente cantaba lo que oía cuando el viento me llevaba lejos y me olvidaba de mí mismo. (Prada, 2004).

A lo largo de su carrera artística, Prada volverá a trabajar una y otra vez sobre la figura de Rosalía, musicando los poemas Negra sombra en su disco Dulce vino del olvido (1985); y Mayo longo, en Trovadores, místicos y románticos (1990). Finalmente, en 2005, sale a la luz la obra discográfica Rosalía, siempre, auténtico homenaje a la poetisa del Rexurdimento, en el que el cantautor berciano se hace acompañar de varios artistas invitados, así como de la Real Filharmonía de Galicia.

Amancio Prada musicó también parte de la obra de otros autores gallegos, como Celso Emilio Ferreiro, en De la mano del aire (1984); o Álvaro Cunqueiro, en A dama e o cabaleiro (1987) y Tres poetas en el círculo (1998). Finalmente, consagró una obra discográfica completa, Lelia Doura (1980), a los trovadores gallego-portugueses de los siglos XII y XIII, basada en las Cantigas de Amor y de Amigo. En este disco Prada interpreta algunos de los textos más bellos de la literatura gallego-portuguesa medieval, como Sedíame eu na ermida de San Simón (Mendiño), A dona que eu amo (Bernal de Bonaval) o Lelia Doura (Pero Eanes Solaz).

En 2001, el tenor asturiano Joaquín Pixán publicó un disco en homenaje al poeta Ramón Cabanillas, coincidiendo con el 125 aniversario de su nacimiento. Acompañado del pianista vasco Alejandro Zabala, Pixán interpretó un total de diecisiete poemas musicados por doce autores, algunos de los cuales compusieron especialmente para esa ocasión. Las canciones provienen de las obras siguientes: No desterro, Vento mareiro, Da terra asoballada y A rosa de cen follas.

Cinco de los doce compositores escogidos son gallegos:
Eduardo Rodríguez Losada, José Luis Marco, Rogelio Groba, Juan Vara y Juan Durán. Los otros siete tienen su origen en otras comunidades del norte de España: Jorge Muñiz (Asturias), Ataúlfo Argenta (Cantabria), Jesús Guridi (País Vasco), Manuel Blancafort, Frederic Mompou y Xavier Montsalvatge (Cataluña) y Antón García Abril (Aragón).

Otro trabajo que pone música a textos literarios gallegos lleva por título A canción de concerto1 y fue grabado entre 1998 y 1999 en Santiago de Compostela por la soprano Laura Alonso y el pianista Manuel Burgueras. La obra constituye el primer volumen de una serie antológica sobre música gallega y en ella se incluyen poemas de Rosalía de Castro, Manuel Curros Enríquez, Alfredo Brañas, Fanny Garrido, Salvador Golpe Varela, Francisco María de la Iglesia, Aureliano J. Pereira o Juan Barcia Caballero. Los compositores que musicaron los poemas están entre los más conocidos de Galicia: José Baldomir, Rogelio Groba, Juan Montes, José Castro Suárez, Chané, Enrique Lens Veira, Jesús Bal y Gay (autor del famos cancionero popular), Marcial del Adalid y Andrés Gaos.

Finalmente, nos detendremos a comentar una obra que consideramos de vital importancia en este terreno. Se trata de un disco editado por BOA Music en 2001 con el título de A canción galega. La obra está patrocinada por el Instituto Galego das Artes Escénicas e Musicais y en ella la soprano Ángeles Blancas interpreta canciones 1 A Canción de Concerto. Cancións sobre textos literarios galegos. Antoloxía. Volume 1. (Xerais, 2000).

gallegas, acompañada al piano por Miguel Zanetti. Algunas de las canciones son de origen popular, como Non te quero por bonita, retocada por el célebre músico coruñés Marcial del Adalid. Pero la mayoría son de autor, como Negra Sombra de Rosalía de Castro y Lonxe d’a terriña, de Aureliano J. Pereira, ambas musicadas por el lucense Juan Montes.

La selección de textos busca la exaltación de la Galicia rural y de sus valores, frente a una Galicia urbana más universalizada. El director del proyecto, José López Calo, se refiere a esta cuestión en los términos siguientes:
Esa Galicia tenía una serie de connotaciones que se encuentran reflejadas en las poesías de estas canciones: ante todo una sensibilidad particular en sus habitantes, que los llevaba a considerar las cosas y hechos más esenciales de la vida (...) de una manera del todo personal, individual. Este fenómeno se daba más en las personas del mundo rural que en las de las ciudades, que ya, de alguna manera, se habían universalizado no poco, mientras que las de las aldeas (…) habían permanecido más fieles a sí mismas, a su herencia histórica. (López-Calo, J., 2001).

Las canciones que integran la obra discográfica fueron compuestas o adaptadas por músicos de gran prestigio en la Galicia del siglo XIX, como Juan Montes (Lugo, 1840-1899), que ya hemos mencionado y que fue un gran estudioso del folklore gallego e hizo numerosas composiciones inspirándose en el mismo. Estudió la música popular de la zona de Lugo y también colaboró en la elaboración del archiconocido cancionero de Casto Sampedro.

Otro de los compositores elegidos es Marcial del Adalid (A Coruña, 1826-1881), que reunió material para el famoso Cancioneiro de Inzenga. Casado con la poetisa Fanny Garrido, Marcial del Adalid se dedicó a la musicación de algunos de sus poemas. También se recoge en el disco una composición de Canuto José Berea (A Coruña, 1836-1891), que fue director del teatro Rosalía de Castro y llegó a ser alcalde de A Coruña. Poseía una tienda de música y una colección de más de 30.000 partituras. La Biblioteca Provincial de A Coruña conserva sus obras en una colección que lleva su nombre. En fin, Andrés Gaos, José Castro Chané y José Baldomir son los otros tres compositores que integran esta obra discográfica.

Si en el terreno de la literatura culta el protagonismo se hallaba en los compositores que musicaban textos de autor, en el terreno de la literatura popular es preciso reivindicar la labor de los integrantes anónimos de los cuatro coros históricos gallegos: Cántigas da Terra (A Coruña), Toxos e Frores (Ferrol), Cantigas e Agarimos (Santiago) y De Ruada (Ourense), fundados respectivamente en 1916, 1914, 1920 y 1918.

La labor de los coros históricos se centró en la recogida minuciosa de melodías populares, canciones, dichos, refranes y toda suerte de material etnográfico, para luego reutilizarlo sobre el escenario. Su objetivo no era otro que el de salvaguardar el patrimonio inmaterial gallego, divulgándolo dentro y fuera de las fronteras de Galicia. Además, los cuatro coros han tenido la oportunidad de grabar varios discos. Todos ellos atesoran en sus archivos una enorme cantidad de textos y de partituras musicales, fruto del esfuerzo de los miembros que fueron pasando por ellos desde su fundación hasta la actualidad.

Algunos de los directores de los cuatro coros históricos de Galicia fueron reputados músicos y compositores, como Manuel Fernández Amor o Ramón González Enríquez. Con frecuencia, estos directores alteraban el material recogido para adaptarlo a las necesidades del coro, o bien componían inspirándose en el mismo.

Los coros históricos tienen el mérito de haber sido los primeros en grabar música gallega en discos de cera y después en vinilo, colocándose así en la vanguardia de la salvaguarda de nuestra música popular.
Pero no sólo los coros han estudiado y trabajado la música y literatura de tradición oral de Galicia. En este terreno encontramos, una vez más, a Amancio Prada. El cantautor berciano dedicó dos discos a la música popular de Galicia. En Caravel de caraveles, publicado en 1976, Prada interpreta una serie de canciones populares, tales como Unha noite no muíño, Eu teño un canciño o Ven bailar Carmiña. Mucho más tarde, en 1999, ve la luz otro disco titulado De mar e terra en el que interpreta coplas de tradición oral como Teño un amor na montaña, Nosa Señora da Barca o Airiños, airiños aires.

La canción protesta tiene en Galicia una relación muy estrecha con la música y literatura populares, ya que se inspira en éstas para generar una identificación con el colectivo al que su mensaje va dirigido, tanto a nivel de recursos estilísticos como de instrumentación.

Con frecuencia, los grupos de canción protesta componen sus letras basándose en melodías tradicionales, o bien musican textos de literatura popular que a veces se confunden con melodías auténticamente populares, como en el caso de la canción Sementeira de Fuxan os Ventos, con texto escrito por Lois Álvarez Pousa y música de Xosé Luís Rivas Cruz.

La canción protesta floreció en Galicia durante los años 70, coincidiendo con los últimos años de la dictadura franquista y con el nacimiento de la democracia. De marcado carácter galleguista y progresista, este género musical reivindicaba la normalización de la lengua gallega y se hacía eco de los problemas del mundo agrario. En general, se trata de una música comprometida con Galicia y con sus valores, con la dignificación de su idioma y de su cultura en un momento en el que éstos no gozaban de ningún rango oficial.

Uno de los grupos más emblemáticos de este género musical es, sin duda alguna, Fuxan os Ventos. Creado en Lugo en el año 1972 con el nombre de Folk 72, se dio a conocer en el III Festival de San Lucas de Mondoñedo, en el que recibieron el primer premio por una canción que luego daría nombre definitivo al grupo: “Fuxan os Ventos”. Si bien los textos que cantaban hacían referencia frecuentemente a la vida política y cultural de la Galicia de la época, las melodías que los acompañaban solían ser de origen popular, lo que, como hemos dicho anteriormente, caracteriza la canción protesta gallega:
Daquela, o grupo viña exercendo de periódico cantado que actualizaba o contido do seu canto segundo se ían producindo os acontecementos. Coa particularidade de que a música, coma o caso reseñado, era popular, o que facilitaba a doada asunción colectiva dun público amplo e diverso, como nunca se tivera dado antes –e presumiblemente tampouco despois– na nosa música cantada. (...) Con esquemas tradicionais desenvolvían uns textos con contido. (Estévez y Losada, 2000: 40).

A lo largo de su historia, los miembros de “Fuxan os Ventos” se dedicaron a investigar la literatura de tradición oral y la música tradicional, incorporando a su repertorio numerosos textos populares que acompañaban a otros textos de autor de contenido social y reivindicativo.

Dentro de este capítulo, no podemos dejar de mencionar al cantante Suso Vaamonde (Pontecaldelas, 1950 – Redondela, 2000), que musicó un gran número de poemas de Celso Emilio Ferreiro y de otros poetas gallegos. En 1978 dedicó un disco completo al poeta de Celanova con el título de Celso E. Ferreiro na voz de Suso Vaamonde en el que musicaba e interpretaba un total de catorce poemas. El año anterior ya había grabado otro disco (...Nin rosmar un laído) con varios poemas de Ferreiro, Darío Xohan Cabana, Manuel María, Valentín Lamas Carvajal y Bernardino Graña.

Pero Suso Vaamonde, al igual que la mayoría de los autores y grupos de canción protesta, bebía igualmente de las fuentes de la música popular, combinando las letras reinvindicativas con canciones puramente populares. Movido por esta preocupación grabó un disco (É nadal) íntegramente dedicado a la panxoliña, género musical gallego similar al villancico pero de raíz exclusivamente popular. Suso Vaamonde estaba integrado en el grupo “Voces Ceibes”, colectivo de canción protesta que tuvo su apogeo a finales de los años 60 y principios de los 70 y del que también formaban parte otras voces destacadas de la canción protesta gallega, como Bibiano, Miro Casabella o Benedicto.

Más recientemente, el grupo “A Quenlla” tomó el relevo de “Fuxan os Ventos”, que en 1989 iniciaría una larga etapa de silencio sólo quebrado momentáneamente para algún que otro concierto.
Fundado por dos miembros históricos de “Fuxan os Ventos”, Mini y Mero, “A Quenlla” supuso un retorno a la esencia de la canción de contenido social y político y, una vez más, recurrió a la musicación de literatura, tanto culta como popular. Xosé Luis Méndez Ferrín, Manuel María, Celso Emilio Ferreiro o Darío Xohán Cabana son algunos de los poetas musicados por “A Quenlla”.

Las conexiones que encontramos entre música y literatura en Galicia, tanto en el caso de la literatura culta como en el de la popular y en el terreno de la canción protesta, son numerosas y fecundas. Este hecho no es más que una muestra de la íntima relación que existe entre las dos formas de expresión artística, que antiguamente se confundían:
O que si é certo, mesmo comprobábel, é a simbiose que secularmente xunguiu á poesía coa música. Ambas disciplinas artísticas teñen en común un elemento condicionante: o ritmo –ampliábel tamén ao mundo da danza–. A pouco que o lector de poesía repare, decatarase da melodía que, de seu, posúe esta forma de expresión artística. Daquela, adoitan seren elementos indisociábeis desde a súa propia orixe, malia que durante o século XV comezan a desenvolverse con autonomía cadansúa disciplina: poesía e música serán manifestacións artísticas separadas entre si... [...] (Estévez y Losada, 2000: 122).

El renacer musical de Galicia desde los años 70 renovó el interés de nuestros músicos por la literatura. En algunos casos, como hemos visto, el enfoque que se le dio a esta tarea tuvo un objetivo claramente político y social. En otros, la finalidad era puramente poética, aunque ambas perspectivas comparten sin duda un profundo amor por Galicia y un compromiso inequívoco con su lengua y su cultura. Todos ellos contribuyeron de una u otra forma a revitalizar y popularizar textos literarios –cultos o populares– que llegaron así a un público más amplio:
Moito máis próximos a nós son casos [...] nos que músicos actuais volven reproducir esquemas lendarios; isto é, musicación de poetas, normalmente rescatados da súa condición escrita. (Estévez y Losada, 2000: 122).

En este trabajo hemos pretendido revisar algunos de los grupos y autores de música gallega que se han servido de la literatura, culta o popular, para la creación de sus obras. Hemos considerado además, algunos de los grupos más conocidos de la llamada canción protesta, que también se sirvió en mayor o menor medida de la literatura, culta y popular, para la construcción de su discurso, con el objetivo de identificarse al máximo con el pueblo y sus formas de expresión más tradicionales. Todos ellos han contribuido de una u otra forma a moldear y configurar la música gallega tal y como ésta ha llegado a nuestros días.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
A Canción de Concerto. Cancións sobre textos literarios galegos.
Antología (2000). Volume 1. Xerais.
ESTÉVEZ, X. M. y LOSADA, O. (2000). Crónica do folk galego. 25 anos de historia. Lugo: Tristram.
LÓPEZ-CALO, J. (dir.) (2001). A Canción galega. Col. Música Clásica galega. BOA Music.
PIXÁN, J. y ZABALA, A. (2001). Ramón Cabanillas. Poemas musicados. Columna Música.
PRADA, A. (2004). Rosalía de Castro. Fonomusic.

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