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Eduardo Rodríguez-Losada |
Eduardo Rodríguez-Losada Rebellón, nado na Coruña o 2 de marzo de 1886 e finado o 2 de novembro de 1973 na mesma cidade, foi arquitecto e compositor.
Traxectoria
Casado con María Trulock Bertorini o
día 15 de Outubro de 1913, tiveron dez fillos. O día 2 de Maio de 1941
foi nomeado Académico de Número da Sección de Arquitectura da Real
Academia Nuestra Señora del Rosario e máis tarde, o 28 de Novembro de
1954, Académico de Honor.
As súas obras orixinais foron doadas
polos seus fillos á Real Academia Nuestra Señora del Rosario de La
Coruña. Tamén se poden atopar copias na Fundación March, na Sociedade de
Autores e na Propiedade Intelectual.
Obra Óperas:
El Monte
de las ánimas , (orixinal de G. A. Bécquer. Verso de Núñez de Cepeda )
(1927) -Estreada e dirixida polo autor o 6 de Mayo de 1927 no Teatro
Rosalía de Castro.
O Mariscal ,(libro en gallego de Ramón
Cabanillas y Antón Vilar Ponte)(1929) - Estreada e dirixida polo autor o
31 de Mayo de 1929 no Teatro Tamberlick de Vigo-
¡Ultreya! (libro de Armando Cotarelo) Autógrafo (1935) - Estreada o 12 de Marzo de 1935 no Teatro La Zarzuela de Madrid.-
El Gran Teatro del mundo,(libro de Calderón de la Barca) Autógrafo.-Existe un borrado para voz e piano. Sen estrear
Poemas sinfónicos:
El diablo mundo (Ballet). Coreográfico. Autógrafo.
El miserere. Sobre textos de Gustavo Adolfo Bécquer. Autógrafo
Los Caneiros,(Impresión sinfónica. Autógrafo.) (1946) Interpretada o 17
de Novembro de 1946 po la Orquesta Sinfónica de Bilbao dirixida por
Jesús Arrámbarri no Teatro Buenos Aires de Bilbao.
El Gnogmo,
(Poema sinfónico sobre una lenda de Gustavo Adolfo Bécquer. Autógrafo.)
(1925) Estreado ó 8 de Maio de 1925 po la orquesta Sinfónica de Madrid,
dirigida por Enrique Fernández Arbos en el Teatro Rosalía de Castro de
La Coruña.
La Santa Compaña, (sobre libro de Rey de Viana) Autógrafo. Existe redución para piano e borrador.
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Caricatura de Eduardo dirixindo a sua opera "O Mariscal" 27 de mayo de 1923 no Rosalia de Castro. |
Sinfonías:
Sinfonía en Sol menor (Autógrafo). Existe unha transcrición para dous piano(Manuscrito)
Sinfonía en La menor.(Autógrafo) (1949). Estreada 4 de Decembro de 1949
pola Orquesta Municipal de La Coruña e dirixida por Rodrigo A. de
Santiago no Teatro Rosalía de Castro.
Sinfonía en Do menor.(Autógrafo).
Sinfonía en Re menor.(Autógrafo).
Concierto para piano y orquesta en Si bemol.(Autógrafo). Estreado o día
29 de Maio de 1955 porla Orquesta Sinfónica Municipal de La Coruña e
dirixida por Rodrigo A. de Santiago . Pianista Pilar Cruz . No Teatro
Rosalía de Castro da Coruña.
Música de camara:
Colección de 9 cuartetos
Coleccion de 3 trios O nº1 estrenado el 26 de xaneiro de 1948 na
Escuela Naval de La Coruña Violín: Horacio Rodríguez Nache. Violoncello:
José Béjar. Piano: Pilar C Rodríguez Nache. Violoncelo José Béjar y
Piano Pilar Cruz.
Preludio en Sol mayor para dos violines y piano , Adicado a súa filla Carmen Losada-Trulock
4 sonatas para piano
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Aportación de Alejo Amoedo Portela |
Eduardo Rodríguez-Losada Rebellón, nado na Coruña o 2 de marzo de 1886 e
finado o 2 de novembro de 1973 na mesma cidade, foi arquitecto e
compositor.
En 1929 se estreno en Vigo, su Ópera "O Mariscal"
con letra de Vilar Ponte y Ramón Cabanillas, en el teatro "Tamberlick"
de Vigo. Este año en el Xacobeo, se recupera la obra y será interpretada
por La soprano Ponteareana Teresa Novoa y el baritono Javier Franco con
la orquesta Sinfónica de Galicia, dirigida por Joam Trillo.
http://classics.xacobeo.es/es/eventos/opera-%E2%80%9Co-mariscal%E2%80%9D-de-eduardo-rodriguez-losada-y-ramon-cabanillas-recuperacion-en-tiempos-m-1
Aportación anónima a páxina
La Fundación Mondariz Balneario
publica en 2010 un extenso estudio sobre E. R.-Losada Rebellón que
abarca su obra arquitectónica (era arquitecto de profesión) de la
mano del Colegio oficial de Arquitectos de Galicia.
En un segúndo volúmen Rogelio groba
estudia la obra musical "O ´Mariscal", y un tercer volúmen
incluye la copia del original de R. Cabanillas.
Se debe corrogir el extendido mito de
su estreno en Vigo, puesto que el verdadero estreno se realiza en el
Teatro Rosalía de Castro / A Coruña. Como sucedió con la obra
literaria, el estreno no estuvo exento de probelmas. Fue saboteado
por la autoridad del momento, por la misma identificación que
despertaba con el movimiento galleguista. El estudio de la Fundación
Mondariz Balneario no deja dudas al respecto, adjuntando la
documentación pertinente. Igualmente existen menciones en la prensa
de la época.
Eduardo Rodríguez-Losada Rebellón (2
de marzo de 1886 - 2 de diciembre de 1973) era hijo de Camilo
Rodríguez-Losada Ozores y de Felipa Rebellón Vázquez. Fue el menor
de seis hermanos: José, Dolores, Carmen, Luisa y Jacoba.
Eduardo R.-Losada Rebellón nació en A
Coruña, en el edificio de la Calle Tabernas 30, donde vivió su
juventud. Se trasladó a Madrid durante su etapa como estudiante de
arquitectura, para regresar e instalar su estudio en la Coruña. En
la Calle Tabernas siguió viviendo tras su matrimonio (1913) con
María Trulock Bertorini.
En 1919, a los 33 años D. Eduardo cayó
enfermo de tuberculosis, debiendo seguir un severo tratamiento
durante varios años. Con tal motivo el matrimonio con –por
entonces- cuatro hijos empezó a viajar cada año al Escorial.
Eduardo Rodríguez-Losada Rebellón y
María Trulock Bertorini tuvieron diez hijos: Josefina, Camilo,
Jacobo, Eduardo, Mercedes, Carmen, Pilar, Antón y Javier.
Eduardo R. Losada se casó con Doña
María Trulock Bertorini (25 de agosto de 1889-13 de septiembre de
1980). Aunque nació en Galicia / Santiago, ella era hija del
Británico John Trulock Glascott y de Josefina Bertorini Jones. María
era la mayor de siete hermanos: John, Camila, Margarita, Mª del
Carmen, Ana Mª y Jorge.
El padre de María; John Trulock
Glascott, fue el Gerente de “The West Galicia Railway Company”,
sociedad con sede en Londres que finalizó y gestionó la primera
línea de ferrocarril de Galicia (tramo Carril – Santiago,
popularmente conocido en la época como “El Compostelano”). Esta
línea ferroviaria convirtió a Galicia en una de las zonas
principales de abastecimiento de carne de vacuno del Reino Unido, a
donde llegaba procedente del Puerto de Vilagarcía.
La Madre de María; Josefina Bertorini
Jones, recoge en sus apellidos el doble origen inglés e italiano. Un
abuelo de María -Pietro Bertorini, Pisano- fue gobernador de Parma,
y por razones políticas se vio obligado a abandonar Italia. El hijo
de Pietro, Camilo Bertorini, nacido en España (Barcelona), se casó
con María Margarita Jones, oriunda de Gales.
Durante su residencia en Padrón, María
M. Jones conoció a Rosalía de Castro, quien le dedicó los versos,
“A Morte do Xeneral Inglés Sir John Moore”. Un extracto de este
poema figura en el Jardín de San Carlos de La Coruña, Tumba del
General Inglés.
Coetánea de Fernando Alvarez de
Sotomayor (Ferrol, La Coruña, 1875 - Madrid, 1960), María Trulock
Bertorini fue retratada en dos ocasiones por el pintor.
María Bertorini era la segunda hija en
una familia de siete hermanos. Su hermana Camila, se casó con D.
Camilo Crisanto Cela Fernández, padres del escritor y Premio Nobel
Camilo José Cela Trulock.
Camilo José Cela residió parte de su
juventud en La Coruña con la familia de Eduardo Rguez.-Losada, en
los años de la postguerra civil. En esta etapa tuvo especial
relación con el arquitecto y compositor.
Uno de los escritores que más inspiró
a Rguez.-Losada fue Gustavo A. Becquer. En la segunda mitad de la
década de los veinte se inspira en tres de sus Leyendas para
componer “El Monte de las ánimas”, “El Miserere” y “El
Gnomo”.
“El Gnomo” y “El Miserere” son
poemas sinfónicos para gran orquesta. “El Gnomo” se estrenó en
el Teatro Rosalía el 8 de mayo de 1925, con la orquesta Sinfónica
de Madrid (el estreno fue dirigido por Enrique Fernández Arbós).
El estreno de “El Gnomo” supondría
para R-Losada recibir los reproches de Antón Vilar Ponte: en su
artículo "Al margen de un poema sinfónico. El eterno defecto
de los gallegos", (Galicia):
“No hay derecho a que un gallego y un
coruñés precise a estas alturas, cuando todos lamentamos el atraso
en que se halla la música culta de nuestra tierra, recurrir a una
leyenda del sevillano Gustavo Adolfo Bécquer para inspirarse [...] ¿
Es que en Galicia no hay leyendas y leyendas hermosísimas muy
superiores a la mencionada del poeta andaluz autor de las Rimas ?
[...] Una vez más se da el caso del gallego - y del gallego
inteligente, que es lo triste - volviéndose de espaldas a las
fuentes de inspiración autóctonas y buscando lo universal, no en lo
cercano, como la buena lógica aconseja, sino en las lejanías del
estéril exotismo. Fuese gallego e inspirado en tema gallego el poema
sinfónico que acaba de estrenar el señor Rodríguez Losada y
nuestra música entonces tendría un día de fiesta inolvidable, con
registro áureo e imperecedero en la historia de las artes del
terruño. No lo ha sido y todos veremos en El Gnomo un trozo musical
más de tantos discretos y reveladores de un compositor de excelentes
condiciones que con frecuencia surgen... En el pecado llevará la
penitencia el distinguido arquitecto coruñés”.
“El Monte de las ánimas” es un
drama musical en dos actos con libreto de Julio Casas, puesto en
verso por Nuñez Cepeda, que R.-Losada estrena bajo su dirección el
6 de mayo de 1927 en el Teatro Rosalía de Castro de A Coruña.
“O Mariscal” –la primera ópera
con libreto en gallego -, se estrenó en A Coruña en 1929.
Basada en la obra de Ramón Cabanillas
Enriquez (1876-1959), y contó con Antón Vilar Ponte (1881-1936)
como co-autor, de cara a la historia, cuando en realidad fue promotor
y prologuista de la obra literaria.
El estreno de la opera sucedió en el
teatro Rosalía de Castro el 27 de marzo de 1929, (19:00 hrs.).
A pesar de la existencia de un programa
de este acto, existe alguna discrepancia sobre la consideración de
tal como la fecha oficial del estreno. Algunos autores se refieren a
Vigo / Teatro Tamberlick, y al 31 de mayo de 1929 como fecha de
inauguración.
El motivo de esta confusión es que en
el estreno de La Coruña se produjeron alborotos en el palco de
autoridades.
Decía el Faro de Vigo que “cuando la
representación avanzaba, como desde el gobierno civil se podía
acceder al teatro, la primera autoridad provincial de La Coruña, con
unos amigos, penetró en el palco portando botellas de champán, que
descorchó para sus particularísimos invitados. Los taponazos
molestaron a Losada. El testigo del hecho nos dice que el músico y
director tiró la batuta y el ensayo-representación no continuó”.
De este modo, se prefiere hacer
referencia al estreno en Vigo como estreno inaugural y denominar el
acto de de la Coruña como “ensayo general”.
Si bien constan las precauciones de las
autoridades ante la reciente tragedia en el “Teatro Novedades”,
en Madrid, la previa autorización de este estreno en el Rosalía de
Castro hace que algunos historiadores no relacionen este alboroto con
las condiciones del Teatro Rosalía de Castro, sino con el ambiente
político de la época (pocos meses después dimitía el General
Primo de Rivera), en creciente enrarecimiento en lo que se refiere a
contenidos de corte regionalista en España, galleguista en este caso
por la participación de los autores literarios.
Emilo Xosé Insua describe algunas
reacciones tras la edición de la obra literaria de O´Mariscal:
“A reacción de conspicuos
representantes do regionalismo sano y bien entendido contra esta
reivindicación pardo-celiana levada a cabo polo nacionalismo galego
a partir de 1916 non se fixo agardar. O daquela alcalde da Coruña,
Manuel Casás Fernández (1867-1960), por exemplo, advertiría desde
as páxinas de La Voz de Galicia sobre a necesidade de exercer unha
crítica severa contra certas lendas e auréolas históricas como as
que rodeaban a figura de Pardo de Cela. Alén de reivindicar os
irmandiños (inimigos declarados do Mariscal e dos seus parentes
Pedro Bolaño, marido da filla daquel, Beatriz, e Pedro Miranda) como
verdadeiro símbolo das ansias de redención do país, Casás
Fernández, citando como autoridades ao Licenciado Molina, a Vasco de
Aponte, a José Villaamil e a Murguía, presentaba ao Mariscal como
un déspota feudal, saqueador, orgulloso e cheo de cobiza, inimigo
dos Reis Católicos só porque estes querían pór fin ás súas
arbitrariedades e desmáns, completamente alleos a todo sentir ou
reivindicación patriótica.
Con estos precedentes, la crítica de
Otero Pedrayo en “Nos” deja constancia del desasosiego e
incertidumbre que rodeaba el estreno de la opera en Vigo:
“Unha agarda esperanzada. A
Conciencia de algo novo, forte e fondamente galego que se vai
manifestare. Ledicia un pouco angustiosa dos poucos minutos que
faltan. Os montes azues, a badía centilante, o elán moderno das
rúas, síntese a través dunha emoción.
¿Si calquer cousa chegara para
impedila?. Xa aconteceu hai poucos días na Cruña. Non sabemos que
mestereosas potenzas esbarrallarán a nosa esperanza”.
La investigación de Emilio Xosé Insua
–publicada en “Sobre O´Mariscal de Cabanillas e Vilar Ponte”-
es rigurosa, y concluye que “Antón Villar Ponte e Ramón
Cabanillas non se deberon de coñecer durante a súa mocidade de
activismo republicanista"…,”ambos autores comezaron a partir
de 1915 un proceso de sintonización no persoal e no ideolóxico que
desembocou nun intenso entendemento no seo das Irmandades da Fala.
Entre 1916 e 1922 rexistramos o período de máxima sintonía entre
ambos autores"(...). Será entón, precisamente, cando se xeste
e se confeccione O Mariscal”.
“probabelmente foi a finais de 1916
ou comezos de 1917 cando deu comezo o proceso”.
Sin duda es también A. Vilar Ponte el
germen de la idea de una ópera que sirviera de trampolín al trabajo
de Ramón Cabanillas, y quien anticipa y facilita un borrador a
Rguez-Losada tras anunciarle su proyecto en común con Cabanillas.
También es orientativa alguna
documentación localizada por el propio Emilio Xosé Insua: “Unha
carta de Castelao ao escenógrafo Camilo Díaz Baliño, gardada no
Museo Carlos Maside de Sada, serve para certificar que o arranque do
proceso de composición de “O Mariscal” é, en todo o caso,
anterior á propia estrea de “A man de Santiña”, verificada como
é sabido na Coruña o 22 de abril de 1919. O rianxeiro, despois de
facer unha serie de suxestións a Díaz Baliño para a confección do
cartaz anunciador desa estrea, informaba ao artista ferrolán na súa
epístola: "Escoita, chachiño: está faguendo Cabanillas unha
obra que iso si que é cousa boa. En verso ¿sabes? E chámase O
Mariscal”.
Respecto del estreno de la ópera,
destaca que el propio compositor actúa de nuevo como director de la
orquesta, siendo ilustrativa la caricatura que un popular
caricaturista de la época, Sr. Pellicer, hizo del Compositor con tal
motivo. Entre el elenco de artistas se encontraba la Sra. Honoria
Goicoa, tía de la actual Presidenta de la Real Academia de Bellas
Artes de Galicia (Doña Mª de las Mercedes Goicoa Fernández),
además de Enriqueta Brandón, Juan Estrada, Arcadio Malvís, Fco.
Iglesias, Jesús Arias, Venancio Deus, Fernando Navarrete, J.
Alvarez, Enrique Brandón, Julia Catoira, con la orquesta de la
sociedad Filarmónica de A Coruña.
La obra transcurría en seis escenarios
diferentes –algo sorprendente en la época- diseñados por Camilo
Díaz Baliño.
Camilo Díaz fue el escenógrafo más
importante y uno de los artistas gráficos más destacados de
Galicia. Trabajó como delineante en la Diputación Provincial de A
Coruña, donde conocería a E. R.-Losada, y para el que ya había
trabajado en “El Monte de las Ánimas”. Así mismo, realizó
junto con Castelao la puesta en escena y escenografía de la obra de
Cabanillas “A man da Santiña”. Casado con Antonia Pardo Méndez
tuvo tres hijos, uno de ellos Isaac Díaz Pardo, famoso pintor y
ceramista.
Según las crónicas, en la
escenificación de O´Mariscal Camilo Díaz se dejó influir “por
Castelao y la estampa japonesa” –lo cual ratifica la
correspondencia mantenida entre Díaz y Castelao-, haciendo “una
decoración romántica estilizada en la que los carballos de la
acotación del autor son pinos esbeltos en primer término, a través
de la reja que forman se ve una montaña y el castillo donde va a
fraguarse la traición del astuto Mudarra”, recreando con precisión
el ambiente de lo que sucedió la noche del 7 de diciembre de 1493
Sobre la relación de Vilar Ponte y
Rguez.-Losada:
Resulta conveniente una mención a los
antecedentes familiares de R-Losada y Vilar Ponte para entender la
coincidencia de los partícipes, ya conocida la relación de Vilar
Ponte y Cabanillas. El compositor era –por parte de madre-
originario de Viveiro, de donde también lo eran los antecedentes de
Antón Vilar Ponte. Ambas familias se conocían y esto fue la base
para que Antón y Eduardo compartiesen su melomanía y proyectos en
las tertulias culturales en las que coincidían en A Coruña.
Igualmente, debe destacarse que por
parte de su familia pólítica también existió gran relación:
Camilo C. Cela Fernández coincidiría con Antón Vilar Ponte en Foz
entre 1903 y 1906. Pondrían en marcha –junto a Noriega Varela- el
periódico satírico “¡GUAU...GUAU!”.
Como arquitecto, Eduardo
Rodríguez-Losada era uno de los escasos profesionales que en 1913
ejercían en A Coruña, entre una docena de nombres que iniciaban una
arquitectura progresivamente despegada de los lenguajes académicos,
y firmantes de las nuevas formas estilísticas que iban a surgir en
la configuración urbana coruñesa.
Con la bonanza económica de los años
veinte, A Coruña –Como Santander o San Sebastián- buscaba
rehabilitar su centro urbano y mejorar su fachada marítima. Ello
suponía responder a la sobrepoblación del “barrio de la
pescadería”, con pisos reducidos –especialmente grave en una
época de familias numerosas-, sin luz y sin zonas verdes.
Existen muestras notables de la obra
arquitectónica de Rodríguez-losada, entre la que siempre habrá que
lamentar la demolición de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de A
Coruña (para la posterior construcción en su lugar de la actual
sede de Caixa Galicia, en Rúa Nueva). Sin duda era una obra especial
por el uso del granito en sus volúmenes y el tratamiento de las
formas, que la identificaron como un ejemplo de arquitectura influida
por la corriente galaica culta y rotunda.
La Enciclopedia Gallega menta la
valoración de Fernández-Albalat, quien lo identifica con la línea
eclecticista de su época, con preocupación compositiva en las
fachadas, repertorio de torreones en esquina o pináculos en
coronamientos que reflejan un cuidado en el diseño de los elementos
ornamentales.
Muestras de su obra se encuentran hoy
en el denominado –por entonces- “Ensanche” coruñés, que
expandió el urbanismo fuera de las antiguas murallas. El
Ayuntamiento dedicó las calles de este barrio a las ciudades
gallegas, y por ello hoy se identifica claramente esta zona: plazas
de Galicia, Lugo, Ourense, Pontevedra y Vigo, o calle Betanzos,
Compostela...
Pero entre la obra menos identificada
con el arquitecto figura el diseño y construcción de la Ciudad
Jardín de A Coruña, ideada a principios del siglo XX. El proyecto
pretendía una planificación urbanística basada en casas
unifamiliares. Un modelo de urbanización importado de Europa que
buscaba el alojamiento ideal para todas las clases sociales, que -sin
embargo- en España acabó ligada a clases altas, en las afueras de
las ciudades.
La ciudad jardín de A Coruña fue
impulsada por un grupo de vecinos y personalidades que se reunieron
en el Círculo de Artesanos en noviembre de 1921, donde presentaron a
ayuntamiento y a la prensa el proyecto dirigido por Eduardo
Rodríguez-Losada.
A finales de los años veinte, la
Ciudad Jardín estaba ya formada por más de 40 chalés, dos
edificios destinados "a la enseñanza y a la educación moral"
y un observatorio meteorológico. La nueva zona residencial estaba
conectada con el centro de la ciudad a través de un tranvía. El
proyecto fue un éxito pero la Guerra Civil paralizó el desarrollo
de las obras, debido a la escasez de materiales de construcción.
Años más tarde R.-Losada influiría
de nuevo en el urbanismo coruñés con un modelo similar para
familias de menor capacidad económica; las todavía existentes casas
unifamiliares del barrio coruñés de Montealto.
A mediados de la década de los veinte,
Eduardo Rguez-Losada, con el nacimiento de su 7ª hija, se trasladó
a vivir con su familia a la Ciudad Jardín de A Coruña, en la casa
todavía hoy identificada como “Villa Felisa”, hasta 1939.
A Coruña de principios de siglo XX era
uno de los centros innovadores de Galicia, debido a la industria, la
actividad portuaria y las nuevas entidades financieras. También
influyó la llegada del ferrocarril y servir de sede a un nuevo
organismo: la Diputación, de la que Eduardo Rguez.-Losada sería
Arquitecto durante cuarenta años. Esto resulta difícil en una época
de la historia española en la que la polaridad política fue
especialmente destacada, pero explica que a la obra del arquitecto
concentrada en la ciudad haya que unir otra, dispersa por la
provincia.
- Anónimo6 de agosto de 2012 14:50Existe un trabajo sobre Eduardo Rodriguez-Losada realizado por Xoan M Carreira Antelo, publicado como separata de la Revista de Musicología (1986).
Carreira incluye entre la obra del compositor diferentes canciones entre las que destacan "Seis canciones Gallegas", en las que utiliza versos de Cabanillas, Rosalía de Castro y Eduardo Pondal.
Estas sencillas obras no fueron grabadas.
Probablemente la canción en la que emplea versos de Pondal fue con la que ganó un premio concedido por la Diputación de Pontevedra en 1954.
La Fundación Mondariz Balneario publica en 2010 un extenso estudio sobre E. R.-Losada Rebellón que abarca su obra arquitectónica (era arquitecto de profesión) de la mano del Colegio oficial de Arquitectos de Galicia.
ResponderEliminarEn un segúndo volúmen Rogelio groba estudia la obra musical "O ´Mariscal", y un tercer volúmen incluye la copia del original de R. Cabanillas.
Se debe corrogir el extendido mito de su estreno en Vigo, puesto que el verdadero estreno se realiza en el Teatro Rosalía de Castro / A Coruña. Como sucedió con la obra literaria, el estreno no estuvo exento de probelmas. Fue saboteado por la autoridad del momento, por la misma identificación que despertaba con el movimiento galleguista. El estudio de la Fundación Mondariz Balneario no deja dudas al respecto, adjuntando la documentación pertinente. Igualmente existen menciones en la prensa de la época.
Eduardo Rodríguez-Losada Rebellón (2 de marzo de 1886 - 2 de diciembre de 1973) era hijo de Camilo Rodríguez-Losada Ozores y de Felipa Rebellón Vázquez. Fue el menor de seis hermanos: José, Dolores, Carmen, Luisa y Jacoba.
ResponderEliminarEduardo R.-Losada Rebellón nació en A Coruña, en el edificio de la Calle Tabernas 30, donde vivió su juventud. Se trasladó a Madrid durante su etapa como estudiante de arquitectura, para regresar e instalar su estudio en la Coruña. En la Calle Tabernas siguió viviendo tras su matrimonio (1913) con María Trulock Bertorini.
En 1919, a los 33 años D. Eduardo cayó enfermo de tuberculosis, debiendo seguir un severo tratamiento durante varios años. Con tal motivo el matrimonio con –por entonces- cuatro hijos empezó a viajar cada año al Escorial.
Eduardo Rodríguez-Losada Rebellón y María Trulock Bertorini tuvieron diez hijos: Josefina, Camilo, Jacobo, Eduardo, Mercedes, Carmen, Pilar, Antón y Javier.
Eduardo R. Losada se casó con Doña María Trulock Bertorini (25 de agosto de 1889-13 de septiembre de 1980). Aunque nació en Galicia / Santiago, ella era hija del Británico John Trulock Glascott y de Josefina Bertorini Jones. María era la mayor de siete hermanos: John, Camila, Margarita, Mª del Carmen, Ana Mª y Jorge.
El padre de María; John Trulock Glascott, fue el Gerente de “The West Galicia Railway Company”, sociedad con sede en Londres que finalizó y gestionó la primera línea de ferrocarril de Galicia (tramo Carril – Santiago, popularmente conocido en la época como “El Compostelano”). Esta línea ferroviaria convirtió a Galicia en una de las zonas principales de abastecimiento de carne de vacuno del Reino Unido, a donde llegaba procedente del Puerto de Vilagarcía.
La Madre de María; Josefina Bertorini Jones, recoge en sus apellidos el doble origen inglés e italiano. Un abuelo de María -Pietro Bertorini, Pisano- fue gobernador de Parma, y por razones políticas se vio obligado a abandonar Italia. El hijo de Pietro, Camilo Bertorini, nacido en España (Barcelona), se casó con María Margarita Jones, oriunda de Gales.
Durante su residencia en Padrón, María M. Jones conoció a Rosalía de Castro, quien le dedicó los versos, “A Morte do Xeneral Inglés Sir John Moore”. Un extracto de este poema figura en el Jardín de San Carlos de La Coruña, Tumba del General Inglés.
Coetánea de Fernando Alvarez de Sotomayor (Ferrol, La Coruña, 1875 - Madrid, 1960), María Trulock Bertorini fue retratada en dos ocasiones por el pintor.
María Bertorini era la segunda hija en una familia de siete hermanos. Su hermana Camila, se casó con D. Camilo Crisanto Cela Fernández, padres del escritor y Premio Nobel Camilo José Cela Trulock.
Camilo José Cela residió parte de su juventud en La Coruña con la familia de Eduardo Rguez.-Losada, en los años de la postguerra civil. En esta etapa tuvo especial relación con el arquitecto y compositor.
Uno de los escritores que más inspiró a Rguez.-Losada fue Gustavo A. Becquer. En la segunda mitad de la década de los veinte se inspira en tres de sus Leyendas para componer “El Monte de las ánimas”, “El Miserere” y “El Gnomo”.
ResponderEliminar“El Gnomo” y “El Miserere” son poemas sinfónicos para gran orquesta. “El Gnomo” se estrenó en el Teatro Rosalía el 8 de mayo de 1925, con la orquesta Sinfónica de Madrid (el estreno fue dirigido por Enrique Fernández Arbós).
El estreno de “El Gnomo” supondría para R-Losada recibir los reproches de Antón Vilar Ponte: en su artículo "Al margen de un poema sinfónico. El eterno defecto de los gallegos", (Galicia):
“No hay derecho a que un gallego y un coruñés precise a estas alturas, cuando todos lamentamos el atraso en que se halla la música culta de nuestra tierra, recurrir a una leyenda del sevillano Gustavo Adolfo Bécquer para inspirarse [...] ¿ Es que en Galicia no hay leyendas y leyendas hermosísimas muy superiores a la mencionada del poeta andaluz autor de las Rimas ? [...] Una vez más se da el caso del gallego - y del gallego inteligente, que es lo triste - volviéndose de espaldas a las fuentes de inspiración autóctonas y buscando lo universal, no en lo cercano, como la buena lógica aconseja, sino en las lejanías del estéril exotismo. Fuese gallego e inspirado en tema gallego el poema sinfónico que acaba de estrenar el señor Rodríguez Losada y nuestra música entonces tendría un día de fiesta inolvidable, con registro áureo e imperecedero en la historia de las artes del terruño. No lo ha sido y todos veremos en El Gnomo un trozo musical más de tantos discretos y reveladores de un compositor de excelentes condiciones que con frecuencia surgen... En el pecado llevará la penitencia el distinguido arquitecto coruñés”.
“El Monte de las ánimas” es un drama musical en dos actos con libreto de Julio Casas, puesto en verso por Nuñez Cepeda, que R.-Losada estrena bajo su dirección el 6 de mayo de 1927 en el Teatro Rosalía de Castro de A Coruña.
“O Mariscal” –la primera ópera con libreto en gallego -, se estrenó en A Coruña en 1929.
ResponderEliminarBasada en la obra de Ramón Cabanillas Enriquez (1876-1959), y contó con Antón Vilar Ponte (1881-1936) como co-autor, de cara a la historia, cuando en realidad fue promotor y prologuista de la obra literaria.
El estreno de la opera sucedió en el teatro Rosalía de Castro el 27 de marzo de 1929, (19:00 hrs.).
A pesar de la existencia de un programa de este acto, existe alguna discrepancia sobre la consideración de tal como la fecha oficial del estreno. Algunos autores se refieren a Vigo / Teatro Tamberlick, y al 31 de mayo de 1929 como fecha de inauguración.
El motivo de esta confusión es que en el estreno de La Coruña se produjeron alborotos en el palco de autoridades.
Decía el Faro de Vigo que “cuando la representación avanzaba, como desde el gobierno civil se podía acceder al teatro, la primera autoridad provincial de La Coruña, con unos amigos, penetró en el palco portando botellas de champán, que descorchó para sus particularísimos invitados. Los taponazos molestaron a Losada. El testigo del hecho nos dice que el músico y director tiró la batuta y el ensayo-representación no continuó”.
De este modo, se prefiere hacer referencia al estreno en Vigo como estreno inaugural y denominar el acto de de la Coruña como “ensayo general”.
Si bien constan las precauciones de las autoridades ante la reciente tragedia en el “Teatro Novedades”, en Madrid, la previa autorización de este estreno en el Rosalía de Castro hace que algunos historiadores no relacionen este alboroto con las condiciones del Teatro Rosalía de Castro, sino con el ambiente político de la época (pocos meses después dimitía el General Primo de Rivera), en creciente enrarecimiento en lo que se refiere a contenidos de corte regionalista en España, galleguista en este caso por la participación de los autores literarios.
Emilo Xosé Insua describe algunas reacciones tras la edición de la obra literaria de O´Mariscal:
“A reacción de conspicuos representantes do regionalismo sano y bien entendido contra esta reivindicación pardo-celiana levada a cabo polo nacionalismo galego a partir de 1916 non se fixo agardar. O daquela alcalde da Coruña, Manuel Casás Fernández (1867-1960), por exemplo, advertiría desde as páxinas de La Voz de Galicia sobre a necesidade de exercer unha crítica severa contra certas lendas e auréolas históricas como as que rodeaban a figura de Pardo de Cela. Alén de reivindicar os irmandiños (inimigos declarados do Mariscal e dos seus parentes Pedro Bolaño, marido da filla daquel, Beatriz, e Pedro Miranda) como verdadeiro símbolo das ansias de redención do país, Casás Fernández, citando como autoridades ao Licenciado Molina, a Vasco de Aponte, a José Villaamil e a Murguía, presentaba ao Mariscal como un déspota feudal, saqueador, orgulloso e cheo de cobiza, inimigo dos Reis Católicos só porque estes querían pór fin ás súas arbitrariedades e desmáns, completamente alleos a todo sentir ou reivindicación patriótica.
Con estos precedentes, la crítica de Otero Pedrayo en “Nos” deja constancia del desasosiego e incertidumbre que rodeaba el estreno de la opera en Vigo:
“Unha agarda esperanzada. A Conciencia de algo novo, forte e fondamente galego que se vai manifestare. Ledicia un pouco angustiosa dos poucos minutos que faltan. Os montes azues, a badía centilante, o elán moderno das rúas, síntese a través dunha emoción.
¿Si calquer cousa chegara para impedila?. Xa aconteceu hai poucos días na Cruña. Non sabemos que mestereosas potenzas esbarrallarán a nosa esperanza”.
La investigación de Emilio Xosé Insua –publicada en “Sobre O´Mariscal de Cabanillas e Vilar Ponte”- es rigurosa, y concluye que “Antón Villar Ponte e Ramón Cabanillas non se deberon de coñecer durante a súa mocidade de activismo republicanista"…,”ambos autores comezaron a partir de 1915 un proceso de sintonización no persoal e no ideolóxico que desembocou nun intenso entendemento no seo das Irmandades da Fala. Entre 1916 e 1922 rexistramos o período de máxima sintonía entre ambos autores"(...). Será entón, precisamente, cando se xeste e se confeccione O Mariscal”.
ResponderEliminar“probabelmente foi a finais de 1916 ou comezos de 1917 cando deu comezo o proceso”.
Sin duda es también A. Vilar Ponte el germen de la idea de una ópera que sirviera de trampolín al trabajo de Ramón Cabanillas, y quien anticipa y facilita un borrador a Rguez-Losada tras anunciarle su proyecto en común con Cabanillas.
También es orientativa alguna documentación localizada por el propio Emilio Xosé Insua: “Unha carta de Castelao ao escenógrafo Camilo Díaz Baliño, gardada no Museo Carlos Maside de Sada, serve para certificar que o arranque do proceso de composición de “O Mariscal” é, en todo o caso, anterior á propia estrea de “A man de Santiña”, verificada como é sabido na Coruña o 22 de abril de 1919. O rianxeiro, despois de facer unha serie de suxestións a Díaz Baliño para a confección do cartaz anunciador desa estrea, informaba ao artista ferrolán na súa epístola: "Escoita, chachiño: está faguendo Cabanillas unha obra que iso si que é cousa boa. En verso ¿sabes? E chámase O Mariscal”.
Respecto del estreno de la ópera, destaca que el propio compositor actúa de nuevo como director de la orquesta, siendo ilustrativa la caricatura que un popular caricaturista de la época, Sr. Pellicer, hizo del Compositor con tal motivo. Entre el elenco de artistas se encontraba la Sra. Honoria Goicoa, tía de la actual Presidenta de la Real Academia de Bellas Artes de Galicia (Doña Mª de las Mercedes Goicoa Fernández), además de Enriqueta Brandón, Juan Estrada, Arcadio Malvís, Fco. Iglesias, Jesús Arias, Venancio Deus, Fernando Navarrete, J. Alvarez, Enrique Brandón, Julia Catoira, con la orquesta de la sociedad Filarmónica de A Coruña.
ResponderEliminarLa obra transcurría en seis escenarios diferentes –algo sorprendente en la época- diseñados por Camilo Díaz Baliño.
Camilo Díaz fue el escenógrafo más importante y uno de los artistas gráficos más destacados de Galicia. Trabajó como delineante en la Diputación Provincial de A Coruña, donde conocería a E. R.-Losada, y para el que ya había trabajado en “El Monte de las Ánimas”. Así mismo, realizó junto con Castelao la puesta en escena y escenografía de la obra de Cabanillas “A man da Santiña”. Casado con Antonia Pardo Méndez tuvo tres hijos, uno de ellos Isaac Díaz Pardo, famoso pintor y ceramista.
Según las crónicas, en la escenificación de O´Mariscal Camilo Díaz se dejó influir “por Castelao y la estampa japonesa” –lo cual ratifica la correspondencia mantenida entre Díaz y Castelao-, haciendo “una decoración romántica estilizada en la que los carballos de la acotación del autor son pinos esbeltos en primer término, a través de la reja que forman se ve una montaña y el castillo donde va a fraguarse la traición del astuto Mudarra”, recreando con precisión el ambiente de lo que sucedió la noche del 7 de diciembre de 1493
Sobre la relación de Vilar Ponte y Rguez.-Losada:
ResponderEliminarResulta conveniente una mención a los antecedentes familiares de R-Losada y Vilar Ponte para entender la coincidencia de los partícipes, ya conocida la relación de Vilar Ponte y Cabanillas. El compositor era –por parte de madre- originario de Viveiro, de donde también lo eran los antecedentes de Antón Vilar Ponte. Ambas familias se conocían y esto fue la base para que Antón y Eduardo compartiesen su melomanía y proyectos en las tertulias culturales en las que coincidían en A Coruña.
Igualmente, debe destacarse que por parte de su familia pólítica también existió gran relación: Camilo C. Cela Fernández coincidiría con Antón Vilar Ponte en Foz entre 1903 y 1906. Pondrían en marcha –junto a Noriega Varela- el periódico satírico “¡GUAU...GUAU!”.
Como arquitecto, Eduardo Rodríguez-Losada era uno de los escasos profesionales que en 1913 ejercían en A Coruña, entre una docena de nombres que iniciaban una arquitectura progresivamente despegada de los lenguajes académicos, y firmantes de las nuevas formas estilísticas que iban a surgir en la configuración urbana coruñesa.
ResponderEliminarCon la bonanza económica de los años veinte, A Coruña –Como Santander o San Sebastián- buscaba rehabilitar su centro urbano y mejorar su fachada marítima. Ello suponía responder a la sobrepoblación del “barrio de la pescadería”, con pisos reducidos –especialmente grave en una época de familias numerosas-, sin luz y sin zonas verdes
Existen muestras notables de la obra arquitectónica de Rodríguez-losada, entre la que siempre habrá que lamentar la demolición de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de A Coruña (para la posterior construcción en su lugar de la actual sede de Caixa Galicia, en Rúa Nueva). Sin duda era una obra especial por el uso del granito en sus volúmenes y el tratamiento de las formas, que la identificaron como un ejemplo de arquitectura influida por la corriente galaica culta y rotunda.
La Enciclopedia Gallega menta la valoración de Fernández-Albalat, quien lo identifica con la línea eclecticista de su época, con preocupación compositiva en las fachadas, repertorio de torreones en esquina o pináculos en coronamientos que reflejan un cuidado en el diseño de los elementos ornamentales.
Muestras de su obra se encuentran hoy en el denominado –por entonces- “Ensanche” coruñés, que expandió el urbanismo fuera de las antiguas murallas. El Ayuntamiento dedicó las calles de este barrio a las ciudades gallegas, y por ello hoy se identifica claramente esta zona: plazas de Galicia, Lugo, Ourense, Pontevedra y Vigo, o calle Betanzos, Compostela...
Pero entre la obra menos identificada con el arquitecto figura el diseño y construcción de la Ciudad Jardín de A Coruña, ideada a principios del siglo XX. El proyecto pretendía una planificación urbanística basada en casas unifamiliares. Un modelo de urbanización importado de Europa que buscaba el alojamiento ideal para todas las clases sociales, que -sin embargo- en España acabó ligada a clases altas, en las afueras de las ciudades.
La ciudad jardín de A Coruña fue impulsada por un grupo de vecinos y personalidades que se reunieron en el Círculo de Artesanos en noviembre de 1921, donde presentaron a ayuntamiento y a la prensa el proyecto dirigido por Eduardo Rodríguez-Losada.
A finales de los años veinte, la Ciudad Jardín estaba ya formada por más de 40 chalés, dos edificios destinados "a la enseñanza y a la educación moral" y un observatorio meteorológico. La nueva zona residencial estaba conectada con el centro de la ciudad a través de un tranvía. El proyecto fue un éxito pero la Guerra Civil paralizó el desarrollo de las obras, debido a la escasez de materiales de construcción.
Años más tarde R.-Losada influiría de nuevo en el urbanismo coruñés con un modelo similar para familias de menor capacidad económica; las todavía existentes casas unifamiliares del barrio coruñés de Montealto.
A mediados de la década de los veinte, Eduardo Rguez-Losada, con el nacimiento de su 7ª hija, se trasladó a vivir con su familia a la Ciudad Jardín de A Coruña, en la casa todavía hoy identificada como “Villa Felisa”, hasta 1939.
A Coruña de principios de siglo XX era uno de los centros innovadores de Galicia, debido a la industria, la actividad portuaria y las nuevas entidades financieras. También influyó la llegada del ferrocarril y servir de sede a un nuevo organismo: la Diputación, de la que Eduardo Rguez.-Losada sería Arquitecto durante cuarenta años. Esto resulta difícil en una época de la historia española en la que la polaridad política fue especialmente destacada, pero explica que a la obra del arquitecto concentrada en la ciudad haya que unir otra, dispersa por la provincia.
Muchas gracias por tu valiosa aportación, la incluiré en el texto.
ResponderEliminarArquitecto, músico, ... .
EliminarNa súa mocidade, Rodríguez-Losada tamén gustou da arte de tourear. E alén da visión dende as bancadas, atrevíase a baixar a area.
Na vella praza de touros da Coruña (na zona da actual rúa Médico Rodríguez), coñecíano como "Rebelloncito el chico".
E. Rguez-Losada tiña unha cicatriz no corpo causada por unha cornada.
Existe un trabajo sobre Eduardo Rodriguez-Losada realizado por Xoan M Carreira Antelo, publicado como separata de la Revista de Musicología (1986).
ResponderEliminarCarreira incluye entre la obra del compositor diferentes canciones entre las que destacan "Seis canciones Gallegas", en las que utiliza versos de Cabanillas, Rosalía de Castro y Eduardo Pondal.
Estas sencillas obras no fueron grabadas.
Probablemente la canción en la que emplea versos de Pondal fue con la que ganó un premio concedido por la Diputación de Pontevedra en 1954.